me está costando madryn esta vez.
antes de irme lo hablaba con inés. esta cosa de tener que volver irremediablemente.
¿a qué volvés?
no supe que responder por primera vez en 6 años de vueltas.
acá la vida me gotea, viste. lenta, gotea. cada gota tarda muchísimo en tomar forma y caer.
estoy hace apenas dos semanas y me parecen dos años.
¿a qué volvés?
la sensación se desdibuja cuando camino por la orilla del mar o recorro la ciudad todavía con espacios solitarios en bici.
a esto vengo, pienso.
o cuando me paro adelante de la puerta de casa y miro la cabañita que compartí 15 años con mi vieja. veo las enredaderas abrazadas de la pared que mamá nunca vio crecer, el banco de plaza, la entrada iluminada por la luz tenue del farol de la entrada, el abedul de la puerta que enmarca todo y recuerdo que es por ese abedul que los abedules son mis árboles favoritos. los más nobles.
vuelvo a este lugar, pienso.
pero después entro,
y no.
no es.
ya
mi casa.
¿a qué volvés?
eterno retorno, siempre.
vuelvo siempre, vuelvo.
pero al parecer siempre no es tan eterno como suena.
¿a qué volves?
a sentir que todavía soy de algún lugar.
pero obviamente
por más que insista
de acá
ya
no.
¿a qué volvés?
y de pronto supe.
y me reí de mi propia tontería.
y pensé que
cuando inés
me vuelva a preguntar
¿a qué volvés?
la respuesta justa
es que vuelvo
al abedul.
no es suficiente, me va a decir inés.
y yo ya sé.
y pienso que lo que más tristeza me da de la revelación
es tener que dejar
al pobre
abedul
sin mi
.
antes de irme lo hablaba con inés. esta cosa de tener que volver irremediablemente.
¿a qué volvés?
no supe que responder por primera vez en 6 años de vueltas.
acá la vida me gotea, viste. lenta, gotea. cada gota tarda muchísimo en tomar forma y caer.
estoy hace apenas dos semanas y me parecen dos años.
¿a qué volvés?
la sensación se desdibuja cuando camino por la orilla del mar o recorro la ciudad todavía con espacios solitarios en bici.
a esto vengo, pienso.
o cuando me paro adelante de la puerta de casa y miro la cabañita que compartí 15 años con mi vieja. veo las enredaderas abrazadas de la pared que mamá nunca vio crecer, el banco de plaza, la entrada iluminada por la luz tenue del farol de la entrada, el abedul de la puerta que enmarca todo y recuerdo que es por ese abedul que los abedules son mis árboles favoritos. los más nobles.
vuelvo a este lugar, pienso.
pero después entro,
y no.
no es.
ya
mi casa.
¿a qué volvés?
eterno retorno, siempre.
vuelvo siempre, vuelvo.
pero al parecer siempre no es tan eterno como suena.
¿a qué volves?
a sentir que todavía soy de algún lugar.
pero obviamente
por más que insista
de acá
ya
no.
¿a qué volvés?
y de pronto supe.
y me reí de mi propia tontería.
y pensé que
cuando inés
me vuelva a preguntar
¿a qué volvés?
la respuesta justa
es que vuelvo
al abedul.
no es suficiente, me va a decir inés.
y yo ya sé.
y pienso que lo que más tristeza me da de la revelación
es tener que dejar
al pobre
abedul
sin mi
.
Tal vez es hora de comprender como Sabina en Comala o Ana Belén en Macondo, que al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver. Vos sos un pez de ciudad, Belén...
ResponderEliminarmadryn es una ciudad de cien mil habitantes.
Eliminarigual entendí a lo que te referías. no se si comparto. ¿por qué decis que soy un pez de ciudad?
De ciudad cosmopolita decía. Bueno, no sepas si compartís y listo, pa'que tanto debate no?
EliminarVolver,
ResponderEliminarcon la frente marchita,
las nieves del tiempo
platearon mi sien.
Sentir, que es un soplo la vida,
que veinte años no es nada,
que febril la mirada
errante en las sombras
te busca y te nombra.
Vivir,
con el alma aferrada
a un dulce recuerdo,
que lloro otra vez.
hola marce.
EliminarPor casi las mismas razones que las tuyas, deje de ir a Madryn hace 6 años, yo vivi alli unos 12-14 años, mis viejos mas de 20. Por razones que no vienen al caso, nos fuimos (de forma separada) y cada vez que volvia sentia que pertenecia cada vez menos a la ciudad (o pueblo), hasta que la ultima vez, senti que no tenia nada que ver con ella.
ResponderEliminarhola jorge. me da gracia que siempre volvés con los posteos nostálgicos.
Eliminartenes alma de bandoleón, como yo.
tenía un enamorado que solía decir que lo que le enamoraba de mi era la nostalgia que había siempre dando vueltas alrededor.
la melancolía es cosa linda, en su justa medida.
abrazo.
Yo deje de pertenecer al pueblo donde viví mucho antes de alejarme de él. Pero en cuanto me fui, supe que iba a volver...
ResponderEliminarA veces solo hace falta desprenderse de la cuna, y que la vida te cambie, te transforme.
El tema no es volver, el tema es como y a donde. No se puede seguir ocupando siempre el mismo lugar, a veces, solo a veces, alcanza con pararse desde otra perspectiva y mirar con ojos distintos lo que toda tu vida estuvo ahí
uno no puede dejar de volver a su origen, ¿no?. es como medio inevitable.
Eliminarigual duele que la vida te cambie. te sentís como estafando a alguien.
no se si es ver lo que siempre estuvo ahí. ver, ves siempre lo mismo. lo que varía es los tamaños, la trascendencia de eso que estaba.
abrazo.
Cada vez que te leo, me sale pensar cómo se debe sentir lo que narrás.
ResponderEliminarSiempre me transmitís perfectamente tus sentimientos...
que bueno eso. tengo que hacer que mi papá lea el blog entonces, jaja.
Eliminarabrazo grande sol.
Belén: sé que lo que voy a decirte no te va a gustar. Vas a buscar mil razones para negarlo y vas a descargar tu enojo a las puteadas.
ResponderEliminarPero la terrible realidad es esta: ¡te estás aporteñando! ¡Sí! una porteña más de esta ciudad de mierda, con su clase mierda que vota a Macri y todo eso. Pero Buenos Aires te infecta lentamente y después ya es tarde; cualquier otro lugar te aburre, parece vacío.
No te resistas, aceptalo. Al final vas a encontrar tangos que en un momento u otro parecen hablar de vos. Después vas a querer explorar más y vas a ver que es un continente sumergido. No por nada muchos de los porteños más conocidos por sus logros nacieron en otra parte.
¡¡Bienvenida!!
¿te parece bob? podemos pelearlo a muerte esto eh. mirá que yo tengo tiempo (y ganas9 de filosofar al respecto de boludeces.
Eliminaryo creo que mas que aporteñarme, me estoy desmadrynizando. a mi capital nunca me gustó. no me gusta su colapso, su calor, su mugre, su histeria. naci en el silencio, el viento, el frío y la soledad, y quiero morirme en un lugar así, de eso estoy segura.
yo a capital lo veo como un espacio de transito, para mi juventud. pero soy amante de la belleza, de lo lindo. a veces lo encuentro en bsas, pero cuesta. es un momento, un pasaje, una imagen. me quedo prendada a eso para sentir que soy parte de. pero en el fondo, muy en el fondo, siento que no.
te doy la derecha igual en que, como dije arriba, soy una amante de la nostalgia y de la melancolía. y capital tiene mucho eso. es una de las pocas cosas con las que me compra y me siento a tono.
me gustaría igual pertenecer a algo. me da tristeza dejar de ser de acá, sin sentirme de ningún otro lado. quién sabe, tal vez en unos años te doy la razón.
Gracias por dejarme el crédito abierto. Yo soy de un barrio marginal (Coghlan-Saavedra) y Mi Bs As realmente es el que viví, como, vos, en los primeros años de facultad. Y -aunque a melancólico y volvedor no me vas a ganar- la ventaja mía es que el árbol de mi infancia (un ciruelo portentoso, con casita) fue talado por los idiotas que compraron mi casa. Aún así quise visitar y ni me abrieron la puerta. No hay a dónde volver. Lo mismo con otros edificios claves de mi historia. Pero BsAs es contradictoria; no te cuida la memoria, te empuja hacia adelante y no es fiel (malditos macristas), Y sin embargo me muero de sólo pensar mudarme, incluso al otro lado de Gral. Paz. Ya viví en Jerusalén y Tel-Aviv, pasé por europa y EEUU y ví lo suficiente. Buenos Aires es El Destino.
Eliminarvos pedime lo que quieras bob, que yo te lo doy.
Eliminara mi me falta todo el barrio y la calle. y también el mundo. serà que tengo raices demasiado gruesas. (que lindo sonò eso, lo tengo que usar)
me gustan los ciruelos. no se que es tel aviv. me tenès que contar de europa y eeuu, ¿me prometès?
nunca se ve lo suficiente igual.
Es totalmente válido volver por el abedul... el sábado a la mañana me desperté mirando unos arbolitos por la ventana, con el sol de las once y jugando con una gatita. Entonces me dí cuenta de que la felicidad, en mi vida, se resume a los arbolitos por la ventana con el sol de la mañana y que en el fondo siempre vuelvo a eso. Es algo que redescubrí recientemente, algo que recuperé casi. Haace poco una persona me dijo que el día que deje de vivir en donde vive va a extrañar los arbolitos y yo le dije que también: muchas veces visito a esa persona para que eventualmente me pueda tirar un ratito en su cama, mirar la ventana con los árboles y sentir que todo está bien.
ResponderEliminarigual no es cualquier arbol, ni los árboles en general, ni el patio.
Eliminares ese arbol en particular.
beso, linda mery.
Este post vino con el recuerdo de la música de los Chalchaleros y esta zamba:
ResponderEliminarA qué volver
La casa ya es otra casa,
el árbol ya no es aquel
han voltiau hasta el recuerdo
entonces a que volver.
Mi perro allá arriba inmóvil
viendo la tarde crecer
y este vacío de ahora
entonces a que volver.
Volver para que, para sentir otra vez
que se desboca tu ausencia
dormida en mis venas borrada en mi piel
para que duela tu ausencia
entonces a que volver.
Mi puente, mi viejo puente
que río veras correr
si lo han llevado de Tilcara
entonces a que volver.
La magia ya se ha perdido
quien la pudiera encender
ni la tierra ya es de tierra
entonces a que volver.
Luego de 11 años de ausencia me debato entre volver - por un rato - y no.
volvé volvé. aunque sea para volver a irte.
Eliminarpero bueno, yo soy muy partidaria de la nostalgia y melancolía. no se vos.
abrazo.
Ay, Belén. Y yo, yo soy de Virgo. Encajo en todas todas las definiciones descripciones enumeraciones defectos (todavía no le encuentro muchas virtudes) del signo. Pero no tengo una Inés que me desestructure.
EliminarMás que partidaria de la nostalgia y la melancolía - saudade me parece tan románticamente apropiada - soy boicoteadora de cualquier fragmento de felicidad que me correspondiera en esta vida.
(En cualquier momento largo el anonimato y me identifico)..
Abrazo
identificate!!!!!. estoy ansiosa (y sin internet, por eso tardè, sorry).
Eliminaraguante la felicidad, by the way. (que english que estoy hoy ehhh)
besote.
Tu carencia de internet atenta contra mi manejo (y control) de la ansiedad. Peor me ocurre a mí que, teniendo internet en el trabajo (y obligada a trabajar conectada, para más datos) tengo vedada la respuesta*
Eliminar*Oh estúpidos y sensuales cortafierros y cortamambos con sus grandes protecciones por un lado y sus flancos descubiertos, por otro.
As you know (para no quedarme atrás) ya tengo identidad.
Besote