hace unos días vino mi papá a visitarme. a mi. en mi casa.
es toda una novedad. en siete años que hace que vivo acá mi papá nunca vino. bha, si. un día, cuando falleció mi mamá. y dos. cuando me recibí.
pero esta vez vino y se quedó en casa conmigo.
convivimos por primera vez, creo, en nuestra existencia.
y es todo raro.
no tenemos mucha conversación. tampoco hacemos nada juntos. solo estamos aca. intercambiamos cada cierto tiempo algunas palabras. miramos peliculas. eso.
yo creo que es una nueva etapa. supongo.
estamos los dos esforzandonos por tender un puente. bueno, un puente es demasiado pretensioso. mas bien una soga, algo. nos miramos desconfiados y tiramos poco, midiendo a ver que hace el otro. nos observamos de reojo, evitamos los tópicos que sabemos implican indefectiblemente peleas, y, estoy segura, nos preguntamos como puede ser que compartamos tantos genes entre los dos si tenemos tan poco que ver.
igual, los momentos del día mas delicados se producen a la hora de alimentarnos, en el almuerzo o la cena. descubrí, a partir de nuestra idílica convivencia, que mi padre se limpia la boca mientras come no con una servilleta, no con el mantel, no con la cortina... sino con el trapo rejilla de la cocina* (cuack). ante mis (leves) protestas, sostuvo que el lo lavaba "bien, bien, con mucha lavandina" y que yo "no tenía que preocuparme".
le comenté la cuestión, horrorizada, a una amiga, y ella me dijo que su padre hace lo mismo.
¿será una cuestión generacional?
me muerdo los labios para no decir algo cada vez que lo veo venir con su plato en una mano y el trapo en la otra.
podría ser peor, pienso. podría usar el repasador, y ahí si, eh, chorreamos mas grasa que sandro, cacho y el cd de los pimpinela GOLD juntos.
es que ustedes vieron, ¿no?. la manzana nunca cae muy lejos del árbol; ya sabemos que aunque la mona se vista de seda, mona queda y que quién mucho abarca, poco aprieta (no, no tiene nada que ver, pero amo ese refrán, tenía que decirlo).
en estos casos lo mejor es hacer oidos sordos y vistas ciegas y sonreir, siempre sonreir, aunque te estés marchitando por dentro. porque todo, pero todo, puede ser peor. asique si yo te digo que es carnaval, vos apretá el pomo nomás. (ya se, nada que ver, pero todo lo que conlleve la palabra apretar me emociona. soy un ser de luz).
pd: le acabo de decir lo del ser de luz a un amigo y me dijo que yo soy mas bien del tipo dementor. para amigos asi, me quedo con el trapo rejilla de mi padre, viste.
*no, no fue una rima involuntaria. la pensé. mucho.
** todo esto me hizo acordar a dick:
es toda una novedad. en siete años que hace que vivo acá mi papá nunca vino. bha, si. un día, cuando falleció mi mamá. y dos. cuando me recibí.
pero esta vez vino y se quedó en casa conmigo.
convivimos por primera vez, creo, en nuestra existencia.
y es todo raro.
no tenemos mucha conversación. tampoco hacemos nada juntos. solo estamos aca. intercambiamos cada cierto tiempo algunas palabras. miramos peliculas. eso.
yo creo que es una nueva etapa. supongo.
estamos los dos esforzandonos por tender un puente. bueno, un puente es demasiado pretensioso. mas bien una soga, algo. nos miramos desconfiados y tiramos poco, midiendo a ver que hace el otro. nos observamos de reojo, evitamos los tópicos que sabemos implican indefectiblemente peleas, y, estoy segura, nos preguntamos como puede ser que compartamos tantos genes entre los dos si tenemos tan poco que ver.
igual, los momentos del día mas delicados se producen a la hora de alimentarnos, en el almuerzo o la cena. descubrí, a partir de nuestra idílica convivencia, que mi padre se limpia la boca mientras come no con una servilleta, no con el mantel, no con la cortina... sino con el trapo rejilla de la cocina* (cuack). ante mis (leves) protestas, sostuvo que el lo lavaba "bien, bien, con mucha lavandina" y que yo "no tenía que preocuparme".
le comenté la cuestión, horrorizada, a una amiga, y ella me dijo que su padre hace lo mismo.
¿será una cuestión generacional?
me muerdo los labios para no decir algo cada vez que lo veo venir con su plato en una mano y el trapo en la otra.
podría ser peor, pienso. podría usar el repasador, y ahí si, eh, chorreamos mas grasa que sandro, cacho y el cd de los pimpinela GOLD juntos.
es que ustedes vieron, ¿no?. la manzana nunca cae muy lejos del árbol; ya sabemos que aunque la mona se vista de seda, mona queda y que quién mucho abarca, poco aprieta (no, no tiene nada que ver, pero amo ese refrán, tenía que decirlo).
en estos casos lo mejor es hacer oidos sordos y vistas ciegas y sonreir, siempre sonreir, aunque te estés marchitando por dentro. porque todo, pero todo, puede ser peor. asique si yo te digo que es carnaval, vos apretá el pomo nomás. (ya se, nada que ver, pero todo lo que conlleve la palabra apretar me emociona. soy un ser de luz).
pd: le acabo de decir lo del ser de luz a un amigo y me dijo que yo soy mas bien del tipo dementor. para amigos asi, me quedo con el trapo rejilla de mi padre, viste.
*no, no fue una rima involuntaria. la pensé. mucho.
** todo esto me hizo acordar a dick:
No hay comentarios:
Publicar un comentario
comentame toda